lunes, 17 de julio de 2017

¿Qué dice mi Espalda de mi? Parte II

La espalda es la encargada de mantenernos erguidos y  en posición vertical, sostiene nuestro cuerpo, por lo tanto se puede decir que la espalda es el sostén de nuestra vida.
En el post anterior vimos cómo las emociones pueden afectarnos en el plano físico, y descubrimos como nos perjudican en la zona cervical.
Hoy  veremos qué emociones nos pueden llegar a causar  dolor físico en la zona dorsal.

ZONA DORSAL:
La parte central de la espalda representa la gran región torácica del
cuerpo comprendida entre el corazón y los pulmones con las vértebras dorsales.

Es una región asociada a la culpabilidad emocional y afectiva.
Reacciona con dolor cuando acumulo y ahogo mis sentimientos  y emociones y soy particularmente sensible con lo que se refiere a la familia y a viejos rencores.

Problemas en la parte central de la columna en ocasiones revelan un sentimiento de vacío interior, generalmente afectivo, lo que lleva a reflejar desconfianza en uno mismo e inseguridad.

El exceso de carga, me va a hacer  llegar a mi límite, ya sea físico o emocional. La idea de tener que cargar con todo, a veces incluso  auto-cargas que nos imponemos nosotros mismos, nos va a hacer acumular tensiones y dolor en esta zona. En este momento construyo medios de protección para no verme afectado, “echo a mis espaldas” toda la responsabilidad por que es donde puedo cargarla e inevitablemente me pasará factura.

Por otro lado los dolores dorsales muestran una difícil relación del individuo con la vida y el entorno en el que se desenvuelve.
Sentirme enfadado con la vida, impotente ante ciertas situaciones e injusticias que vivo o se me presentan en mi día a día, van a provocar reacciones fuertes de cólera e irritación dentro de mí, que me llevan a refugiarme en mí mismo, a esconderme dentro mi burbuja para que la situación no me afecte o lo haga lo menos posible.


Feliz Semana !!
Escuela Aradia